Juro decir la verdad y nada más que la verdad
Ayer pensé en pagar con la misma moneda, y no es que me quiera hacer la santa, pero hay cosas que simplemente no me salen, la venganza es una de ellas, creo que soy intrínsecamente noble, y eso me gusta, me complace. Pero, tampoco me gusta que la gente me reproche y me exija cosas, sobre todo las personas que no tienen ningún derecho sobre mí, y eso me pasa a cada rato tengo que dar y dar explicaciones a gente que no tiene ninguna importancia para mí, eso me enoja mucho.
Quiero aperrar y hacer todo, no dejar nada, apartar cosas me hace sentir mediocre, pero tampoco puedo seguir así o me voy a pudrir por dentro.
Ayer me felicitaron en el hospital, fue casi lo mejor que me ha pasado últimamente.
Y se fue J.C. estuve pensando mucho en él, en nuestras discusiones chistosas, en que lo voy a extrañar, pero todo fue para mejor no está bien hacerse daño gratis, quizás él ni siquiera crea que me importa tanto como para acordarme y escribir sobre él, bueno, sorpresa.
Ahora ando con mi delantal, mi fonendo y mi libreta de apuntes en miniatura con una bella portada de Rebelde, creánme la necesitaba urgente y no habían más, la tía amable que me la vendío me dijo, pero pegale una foto de tu novio pop niñita... sin comentarios jajajaja.
Si leen, no me he casado, no me quiero matar y no me pienso ir de Chile (cosas que me han preguntado últimamente a raíz de mis palabras en este blog), no ando deprimida por la vida, trato de ser optimista con lo malo y agradecida de lo bueno, es sólo que hay cosas que tengo adentro y necesito sacar, y afortunadamente existe este espacio que por casualidad llegó a la vida y trato de aprovecharlo, igual gracias por la preocupación, sirve para armar un mapa en mi cabeza acerca de las personas que valen la pena, hasta que punto se puede confiar en la gente, y no me he llevado malas sorpresas, son todos unos soles bellos y luminosos.